“Algunos profesores no entienden que el niño con TDAH es tan listo o más que el resto, pero es más inmaduro”
“Aunque se dan muchos cursos para explicarlo, todavía pesan muchos tópicos sobre el trastorno“
” El 50% de los menores con TDAH sufre un trastorno del aprendizaje “
Gorka Alonso
Entrevista a Isabel Orjales, doctora en Psicología y profesora de UNED Madrid
¿Cuáles son los puntos calientes del TDAH?
Son aquellas preocupaciones que tienen los padres a la hora de afrontar la vida con un hijo con TDAH. Tienen que entender que se han cambiado los criterios, la intervención psicoeducativa empieza antes del diagnóstico. Está muy extendido en el ámbito educativo que hasta que no se sabe de forma fiable si tiene o no TDAH, no se empiezan a dar pasos en la intervención.
¿Qué es lo que inquieta a los padres?
Me suelen pedir mensajes para los padres que se asoman por primera vez al TDAH con el miedo de que les diagnostiquen. Están en la montaña rusa de afrontar el trastorno, sobrellevarlo, organizar los colegios, qué pasa con el niño que tiene TDAH, la importancia de la medicación, si puede o no prescindir de ella…
¿Cuándo es conveniente empezar con el tratamiento?
Tiene que empezar cuando se detectan en el niño unos síntomas que generan problemas y que no remiten con las medidas educativas habituales en la familia y en el colegio. No podemos esperar a que se produzca el anuncio y el diagnóstico en determinadas situaciones con factores estresantes como puede ser el divorcio de los padres, que incida y agrava el trastorno y no lo generan. Por prudencia se puede retrasar el diagnostico final hasta que se hayan podido aclarar estos aspectos, pero no se puede retrasar y esperar a la atención psicoeducativa.
¿El tratamiento es efectivo?
Si tiene TDAH va a seguir manifestando la sintomatología pero mucho más moderada. Se mejoran los síntomas y mientras el especialista va abordando el problema, también va recogiendo datos de seguimiento que ayudarán al clínico a determinar un diagnóstico diferencial más efectivo.
¿Se consigue normalizar con la madurez?
Aunque se da mucha importancia a la base neurobiológica, realmente el curso del trastorno depende muchísimo de la exigencia del entorno y de las medidas de compensación y apoyo desarrolladas. Luego hay variables con niños con buenas capacidades que sobrellevan el TDA, aunque entre el 30% y 50% de los casos, además de TDAH tiene dislexia, y es un trastorno especifico del aprendizaje que va mas allá. Cuando se diagnostica el TDA hay veces que se olvida diagnosticar más y se llega a secundaria con otros problemas.
¿Cómo se pueden vincular el ámbito educativo y el ámbito sanitario en caso de niños con TDAH?
Hay que hacer un acercamiento a los médicos sobro qué tipo de intervenciones se hacen en el ámbito socioeducativo, porque la idea que se tiene, en general, es que el niño con TDAH requiere adaptaciones metodológicas. Hay un gran desconocimiento de que realmente es necesaria una intervención especifica en el ámbito cognitivo, de la misma manera que un niño disléxico necesita adaptaciones en el aula, como exámenes orales, que no tengan en cuenta las faltas de ortografía… La sintomatología requiere una intervención para enseñar a estos niños estrategias para integrar su trastorno, gestionar mejor las relaciones sociales… Hay que aunar esfuerzos en la detección.
Precisamente la detección temprana es uno de los factores más importantes, ¿no?
Por supuesto. Para que a los médicos les llegue un paciente al que evaluar como TDAH, es necesario que padres y profesores conozcan y comprendan el trastorno. Aunque se les dan muchos cursos, pesan todavía muchos tópicos, como que si el niño con TDAH puede estar quieto viendo la televisión no es TDAH; o que si el niño puede estar leyendo dos horas Harry Potter no puede tener déficit.
Aproximadamente la mitad de los niños con Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) padece, además, un Trastorno del Aprendizaje que les dificulta aún más progresar en sus obligaciones escolares.
La psicóloga Isabel Orjales, en las VII Jornadas de Actualización en Psiquiatría Infantil y Adolescente señaló que “desde el punto de vista de la Intervención Psicoeducativa debemos todavía ir más allá de las adaptaciones metodológicas en la escuela y promover la implantación y generalización de programas de tratamiento individualizados. Estos programas son muy importantes si tenemos en cuenta que uno de cada dos presenta, además, un trastorno específico del aprendizaje”, destacó.
Se caracteriza por la presencia de dificultades en la adquisición y uso de habilidades de la lectura, escritura o razonamiento por disfunciones del sistema nervioso central. Los síntomas nucleares del TDAH mejoran con la maduración y el entrenamiento, pero la optimización de la de atención; o, por ejemplo, que el niño hiperactivo es el niño nervioso y lo que hay que hacer es ponerles muchas actividades, cuando eso hace que se sobreestimulen…
¿Cómo se lleva a cabo esa detección?
Hasta ahora se hace con cuestionarios, que se cumplimentan mal y de forma incompleta. Hay que ahondar en la cumplimentación de los cuestionarios para que se dé una información más completa. Hay que plantear y alertar a los médicos de que en algunos ámbitos se están interpretando los criterios en base a lo que dicen los profesores en los cuestionarios. Incluso cuando a un psicólogo le planteas que tienes tres valoraciones de diferentes profesores que no parecen tener concordancia, tienden a interpretar que uno es más objetivo, pero no caen en cosas obvias como que el profesor de Gimnasia detecta hiperactividad y el de Matemáticas déficit de atención.
¿Los cuestionarios son suficientes?
Hay que dar un feed back de un diagnóstico psicológico distinguiéndolo de la pura cumplimentación de un test. Los padres demandan al psicólogo y al colegio que hagan los test que ha dicho el médico, con la misma impresión de quien encarga análisis médicos. Tienen que entender que no es lo mismo la valoración psicológica de la médica. Detrás de simples puntuaciones de cociente intelectual hay más datos. Hay veces que niños con perfiles de temperamento modelables, muy dependientes del evaluador, pueden dar resultados que enmarcaran el trastorno.
¿Cómo se trata el TDAH en el aula?
Las medidas son de sentido común. El niño con TDAH se fatiga más manteniendo la atención, no sólo se distrae. Pierde información y cuando el profesor dice que algo es muy importante y todos entienden que va a entrar en el examen, él no se entera. Las medidas que necesita un niño con TDAH son las medidas lógicas que necesita un niño que tiene que hacer el aprendizaje como si fuera dos o tres años más pequeño. Puede ser tan inteligente o incluso más que el resto, con altas capacidades, pero en su capacidad para mantener la atención, para perseverar en la persecución de un objetivo, organizarse en las tareas, mantener el cuaderno limpio… La inconsistencia entre lo que ellos saben y reflejan en el examen es muy alta, y se arregla entrenando a lo largo de todo el curso.
¿Hay reticencia a aceptarlo?
Algunos profesores no entienden que tienen una inmadurez crónica. Cuando ves que a los dos minutos del examen aún no ha empezado porque no se ha organizado, o los padres te aseguran que el niño se lo sabía oralmente y el examen es deplorable…
Eso quiere decir algo. Es importante que los profesores entiendan que es un niño inmaduro, como si en una clase de 12 años hubiera uno de 8 años. El profesor no se plantearía si está bien diagnosticado o no, si la sobreprotege o no, sino que lo protegería y vigilaría si se integra. El niño con TDAH es tan inteligente o más que el resto, poro es más inmaduro…
Extracto recogido de Diario de Noticias
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